Teclado musical uniforme.

1. Teclado musical, para cualquier instrumento musical que lo precise (piano,

órgano, acordeón...), que, siendo de la clase de los constituidos por dos tipos distintos de teclas, con distintas dimensiones (blancas y negras), está caracterizado por una distribución uniforme de todas sus teclas, de semitono en semitono, alternando los dos tipos distintos de teclas (blancas y negras).

Teclado musical uniforme.

Objeto de la invención

Se trata de dotar a cualquier instrumento de teclado (piano, órgano, acordeón y similares) , de un teclado uniforme en la distribución de sus teclas, tal como se recoge en la fig. 2 de la pág. 6 y en la fig. 3 de la página 7.

La utilidad radica en poder interpretar con facilidad las piezas musicales escritas sobre un heptagrama (siete líneas, frente al actual pentagrama de cinco) , todo ello conforme a los textos de Propiedad Intelectual desarrollados por quien esto suscribe con R. P. l. números 08/2009/991 y 08/2010/911.

En dicho heptagrama se escriben las notas numeradas de semitono en semitono, sin necesidad de tener que recurrir a ningún signo de alteración como bemoles, sostenidos o becuadros.

Así, de la misma manera que la escritura sobre el heptagrama simplifica la notación musical, el teclado uniforme propuesto, simplificaría eficazmente la ejecución musical.

Pero es que, además, el teclado uniforme propuesto, contaría con otras importantes ventajas sobre el tradicional.

La primera de ellas radica en el hecho de que, al acortar la distancia física entre teclas (independientemente del tamaño de las mismas) , se necesita una menor extensión de los dedos en la mano del intérprete, o lo que es lo mismo, se posibilita una mayor amplitud de ejecución musical.

Otra consecuencia importante, debida a la distribución regular de las teclas, consiste en que todo acorde mayor tendría la misma disposición de dedos, fuera cual fuera la nota principal. Del mismo modo ocurriría con los acordes menores. Todo lo cual redundaría en una importante simplificación, tanto conceptual como de ejecución.

Antecedentes de la invención No conocemos antecedentes en cuanto a la distribución de teclado propuesta. Sí se sabe de algunos intentos de atribuir algún tipo de notación numérica uniforme a las notas musicales en una línea parecida a la nuestra, aunque mucho menos elaborada que la que se desarrolla en nuestros textos de P.I. aludidos anteriormente. En todo caso, los escasos antecedentes que conocemos se refieren tan solo a cuestiones teóricas sobre nomenclatura y escritura musicales, nunca a llevar a la práctica sobre el teclado musical ninguna modificación de su configuración convencional, como es el caso que nos ocupa.

Descripción de la invención En la figura nº 1 de la página 6, se ha dibujado el teclado convencional de un piano o similar. En él se hallan distribuidas, de semitono en semitono, las notas siguientes:

DO -DO# -RE -RE# -MI -FA -FA# -SOL -SOL# -LA -LA# -SI -DO

(Este último DO es el mismo DO del principio, una octava más alta) .

Si utilizamos la notación inglesa, estas mismas notas se escribirían:

C -C# -D -D# -E -F -F# -G -G# -A -A# -B -C

Se puede observar, una cierta irregularidad en esta distribución de teclas de dicha figura nº 1, pues hay dos parejas de teclas consecutivas, ambas blancas, sin que exista una tecla negra intermedia. Ello es debido a que, por pura definición musical, entre las notas MI-FA o entre las notas SI-DO, solo hay un intervalo de un semitono, que es el mismo intervalo que hay entre cualquier otra pareja de teclas blanca-negra o negra-blanca consecutivas. Para ganar en simplicidad de exposición, en las dos figuras de la página 6, aparecen numeradas las notas de cada tecla, a distancia de semitono entre cada dos teclas consecutivas, sean estas del color que sean, con tal de ser consecutivas. Corresponde esta numeración a la misma secuencia de notas que hemos nombrado anteriormente y por el mismo orden:

-2 - 3 -4 -5 -6 -7 -8 -9 -10 -11 -12 -1

(Igualmente este último 1 es la misma nota que el primer 1, una octava más alta) .

La observada irregularidad en la distribución del teclado de la figura nº 1 de la página 6 es lo que se pretende corregir con el teclado propuesto, que es el que aparece en la fig. 2 de dicha pág. 6, con una distribución regular y uniforme de teclas que abarcan las mismas notas anteriores, anotadas también en la parte superior del teclado, aunque, en este caso, se alternan las llamadas teclas blancas y teclas negras sin excepciones de ningún tipo.

Esta invención no pretende, por tanto, dar nueva forma ni disposición a ningún otro elemento interno o externo del instrumento; sólo al teclado, de la manera que se indica en la dicha figura 2.

Descripción de los dibujos

La página 6 contiene dos dibujos o figuras. En el primero de ellos (fig. 1) , se observa la vista en planta de un teclado convencional, recorriendo las trece notas de una octava completa DO-DO, notas que aparecen numeradas en la parte superior de cada tecla.

La figura 2 de la misma página consiste también en otra vista en planta, en este caso, del teclado objeto de esta invención. Recorre las mismas notas del teclado de la figura anterior.

En la fig. 3 de la página 7, se observa el dibujo en planta del mismo teclado de la figura 2 de la página anterior, con las mismas notas. Notas que también figuran escritas, en la parte superior de cada tecla, utilizando, en esta ocasión, los nuevos símbolos identificativos de las mismas, según nuestros textos de P.l. anteriormente aludidos.

Realización preferente de la invención La figura 3 de la página 7 nos da una idea precisa de la más importante realización de esta invención. Se trata de dotar a cualquier instrumento de teclado como pianos, órganos, acordeones, incluso juguetes infantiles de teclado, y, en general, cualquier instrumento musical en el que las notas musicales se accionen mediante teclas al modo y ejemplo del piano usual; de dotarle, decíamos, de un teclado regular y uniforme en el que se alternen las llamadas teclas blancas, más anchas, con las llamadas teclas negras, más pequeñas e incrustadas entre dos blancas, respondiendo cada una de estas teclas a una nota musical diferente, con distancia tonal de un semitono entre cada dos teclas, blanca-negra o negra-blanca, consecutivas.

En esta figura se ha escrito, encima de cada tecla, el símbolo correspondiente a cada nota según la equivalencia expuesta en nuestros textos de P.l. anteriormente aludidos. Esta equivalencia es la siguiente:

DO -DO# -RE -RE# -MI -FA -FA# -SOL -SOL# -LA -LA# -SI -DO

equivale a:

El teclado propuesto no tiene por qué limitarse a recorrer sólo una octava musical, como el de la figura, sino que, como ocurre en el piano convencional, puede prolongarse indefinidamente a derecha e o izquierda, repitiendo la misma sucesión de notas, a través de las octavas colindantes. Del mismo modo, el teclado propuesto podrá comenzar y terminar en la nota que se quiera, siempre que se conserve la distribución propuesta de semitono en semitono y la alternancia de teclas blanca-negra-blanca.... etc.

Se ha dicho ya anteriormente que esta invención se puede aplicar a cualquier instrumento de teclado sin necesidad de cambiar ningún otro elemento en la composición de dicho instrumento. Solo habría que modificar la disposición de las teclas tal como se recoge en la figura 3 de la página 7, y en la figura 2 de la página 6.

1. Teclado musical, para cualquier instrumento musical que lo precise (piano, órgano, acordeón.....) , que, siendo de la clase de los constituidos por dos tipos distintos de teclas, con distintas dimensiones (blancas y negras) , está caracterizado por una distribución uniforme de todas sus teclas, de semitono en semitono, alternando los dos tipos distintos de teclas (blancas y negras) .