1. Dispositivo para adiestrar a los gatos a hacer sus necesidades en el retrete de casa,

caracterizado porque se compone de cinco bandejas de plástico resistente, una de las cuales (1) se acopla a la taza del inodoro, y el resto (2, 3, 4, 5) que van presentando cavidades interiores con diámetros más extensos, se van acoplando a esta bandeja principal hasta conseguir que el gato, por sus propios medios, utilice el retrete cuando retiremos por completo el dispositivo

Dispositivo para adiestrar a los gatos a hacer sus necesidades fisiológicas en el retrete de casa.

Objeto de la invención

La presente invención, según se expresa en el enunciado de esta memoria descriptiva, se refiera a un dispositivo de plástico duro que se acopla en la taza del retrete del cuarto de baño y nos permite adiestrar a los gatos para que hagan sus necesidades en dicho retrete de forma permanente.

El dispositivo se dirige al sector de accesorios para mascotas, y está compuesto por una bandeja principal que se acopla al inodoro, y cuatro bandejas adicionales que se adaptan a la principal y que regulan el ritmo del proceso de adiestramiento.

Antecedentes de la invención

Tradicionalmente los gastos domésticos realizan sus necesidades fisiológicas en una caja con piedras que hay que limpiar y reemplazar con frecuencia. La ventaja de adiestrar a los gatos a usar el inodoro es evitar el engorro y espacio que supone tener una caja con piedras en el suelo, así como los malos olores que produce, y los gastos generados por la reposición continua de piedras.

Se conoce otro dispositivo para adiestrar a los gatos a usar el inodoro, que está basado en una sola pieza cerrada por la parte inferior, la cual tiene cuatro óvalos concéntricos troquelados que se tienen que ir cortando a medida que el gato avanza en el proceso. Este sistema presenta varios inconvenientes. El primero es que no se puede volver a un paso atrás en el proceso, pues una vez el óvalo es cortado no se puede volver a acoplar, y es muy importante que los gatos pueden volver un paso atrás en el adiestramiento si no se adaptan con facilidad al ritmo recomendado. Otro inconveniente es el hecho de tener que ir cortando cada óvalo de plástico duro con una cuchilla, ya que es dificultoso y a la vez engorroso, pues hay que manipular la bandeja donde el gato previamente ha hecho sus necesidades. Además, este sistema sólo sirve para un solo uso, no se podría utilizar en otra ocasión para adiestrar otros gatos. Por último, al estar fabricado en un plástico que tiene que ser cortado, no es un plástico resistente y corre el riesgo de romperse por el propio peso del gato, pues hay razas de gatos domésticos de hasta 12 kg de peso.

Descripción de la invención

El dispositivo de la invención presenta una bandeja principal y cuatro bandejas supletorias acoplables a ésta. La bandeja principal tiene la misma forma que el inodoro, con unos centímetros de margen para que pueda adaptarse a cualquier formato de inodoro con facilidad. Tiene una pestaña sobre la que se acoplan, sin movimiento alguno, cada una de las cuatro bandejas supletorias.

Todas las bandejas supletorias tienen el mismo diámetro, para que se acoplen perfectamente a la principal. La única, pero vital diferencia entre ellas, es el diámetro de la cavidad central, que se va incrementando gradualmente para que el gato aprenda a colocar sus patas sobre la taza del inodoro.

La ventaja de este dispositivo respecto al estado de técnicas anteriores, es que estas bandejas son intercambiables y se adaptan a las necesidades del ritmo de aprendizaje de cada gato. Son más resistentes y reutilizables para futuros adiestramientos de otros gatos.

Para completar la descripción que seguidamente se va a realizar y con objeto de ayudar a una mejor comprensión de las características del invento, se acompaña a la presente memoria descriptiva de un juego de planos en base a cuyas figuras se comprenderán más fácilmente las innovaciones y ventajas del dispositivo objeto de la invención.

Breve descripción de los dibujos

Bandeja 1.- Muestra la bandeja principal, la cual se adapta a la taza del inodoro, y sirve de sujeción para las demás bandejas supletorias.

Bandeja 2.- Muestra la primera bandeja supletoria que se ha de colocar y que no contiene ninguna cavidad.

Bandeja 3.- Muestra la segunda bandeja supletoria que se ha de colocar y que tiene una pequeña cavidad.

Bandeja 4.- Muestra la tercera bandeja supletoria que se ha de colocar y que tiene una cavidad más grande que la anterior.

Bandeja 5.- Muestra la cuarta bandeja supletoria que se ha de colocar y que tiene una cavidad más grande que la anterior.

Líneas discontinuas.- Representan unas pequeñas pestañas que llevan las bandejas con el fin de acoplarse perfectamente a la bandeja principal, dar más resistencia y solidez a la superficie sobre la que se coloca el gato, y evitar que caiga arena al fondo del inodoro durante el proceso.

Descripción de una forma de realización preferida

A la vista de las mencionadas figuras, se comienza por colocar la bandeja principal (1) sobre la taza del inodoro, cerrando el asiento sobre ella. Se acopla la bandeja supletoria (2) que tiene toda la superficie cerrada y a continuación se vierten a la bandeja las mismas piedras que el gato está acostumbrado a utilizar en su caja de arena, y se le retira ésta de su entorno. Por instinto natural, el gato comenzará a subirse al retrete y utilizar esta bandeja como su caja de arena habitual. Una vez el gato está acostumbrado, se cambia la bandeja (2) por la bandeja (3), que tiene una pequeña cavidad en el centro. En el transcurso de los días se van quitando progresivamente la bandeja (3), la bandeja (4), y la bandeja (5), para dejar únicamente la bandeja (1), que además de hacer la función de bandeja de sujeción del resto de las bandejas, actúa como último peldaño en el proceso de adiestramiento, que va ampliando la cavidad interior de las bandejas con el fin de que el gato aprenda a apoyar sus patas y colocarse en la taza del inodoro adecuadamente.

Finalmente se retira el dispositivo por completo, momento en el que el gato ha aprendido a posicionarse sobre la taza del inodoro y ya no necesita las piedras, sino que acude directamente al retrete cuando siente necesidad.

Un gato tiene la necesidad de ocultar sus heces para no ser descubierto por un posible depredador, pero en el momento que sus heces caen al agua del retrete no dejan olor, y por consiguiente el gato ya no siente la necesidad de enterrarlas. Este es el principal motivo por el que un gato puede ser adiestrado a usar el inodoro.

1. Dispositivo para adiestrar a los gatos a hacer sus necesidades en el retrete de casa, caracterizado porque se compone de cinco bandejas de plástico resistente, una de las cuales (1) se acopla a la taza del inodoro, y el resto (2, 3, 4, 5) que van presentando cavidades interiores con diámetros más extensos, se van acoplando a esta bandeja principal hasta conseguir que el gato, por sus propios medios, utilice el retrete cuando retiremos por completo el dispositivo.