GRUA DE PORTICO.

Grúa de pórtico, esencialmente caracterizada por que el fuste es un elemento tubular cilíndrico que por su base inferior se rigidiza a un cuerpo también cilíndrico,

de relativa altura, del que radialmente se tienden en diagonal y en un mismo plano horizontal cuatro brazos huecos de sección preferentemente cuadrangular, los cuales, de idéntica longitud, extremamente se acodan a 90º hacia abajo para determinar las patas de sustentación de la grúa, siendo estas patas portadoras de carros deslizantes montados en ejes verticales que los posibilitan para adaptarse al arco que describe la via de traslación del conjunto; habiéndose previsto que las susodichas cuatro partes se unan entre sí mediante tirantes articulados en correspondencia con los acodamientos a 90°, mientras que en el sentido de translación de la grúa se aplican dos nuevos tirantes que unen las patas dos a dos en puntos próximos a los carros deslizantes; con la particularidad de existir nexos de unión también articulados fijos o variables entre las patas y fuste cilíndrico estando tales nexos de unión materializados por otros cuatro tirantes que se proyectan desde las patas hasta alcanzar inclinadamente un punto sensiblemente elevado del fuste cilíndrico.