1. La placa de descarga rebasada parcialmente con material elástico y memoria de forma,

está caracterizada por ser una placa dental a medida, elaborada en su parte exterior con metil-metacrilato (duro y estático) de diferentes colores y en su interior (pero solo en las zonas retentivas previamente elegidas) con siloxano de vinilopolidimetilo (elástico y con memoria) para aprovechar las zonas retentivas de los dientes naturales sin dañarlos.

2. La placa de descarga rebasada parcialmente con material elástico y memoria de forma, está caracterizada, porque además de la reivindicación 1, lleva un detector de exceso de desgaste, integrado en su cara oclusal, llamado "driver life".

3. La placa de descarga rebasada parcialmente con material elástico y memoria de forma, está caracterizada, porque además de las reivindicaciones 1 y 2, lleva integrada una placa identificativa con el nombre y apellidos del paciente.

4. La placa de descarga rebasada parcialmente con material elástico y memoria de forma, está caracterizada, porque además de las reivindicaciones 1, 2 y 3, lleva integrada una placa con la fecha de su colocación en boca.

Placa de descarga rebasada parcialmente con material elástico y memoria de forma.

La Placa de Descarga rebasada parcialmente con material elástico y memoria de forma, es un dispositivo intraoral, removible por el propio paciente, para desprogramar las posiciones mandibulares inadecuadas y para combatir la compleja patología causada por los hábitos de apretamiento y/o rechinamiento de los dientes, así como las sobrecargas neuromusculares que provocan dichos hábitos. También se prescriben como protectoras de prótesis sobre implantes. Es un producto sanitario a medida.

Objeto de la invención

Consiste en una placa acrílica adaptada sobre los dientes superiores. Está confeccionada con un material duro (metil-metacrilato) menos en las zonas retentivas de su cara interna, que lleva un material elástico y con memoria (siloxano de vinilopolidimetilo). Lleva incorporado un "driver life" (más adelante se explica su función) y está personalizada con el nombre y apellidos del paciente, y con la fecha de fabricación. Se confecciona en diferentes colores (a elección del paciente) para disimular el desgaste natural que el material sufre con las agresiones bucales y el paso del tiempo. Es un dispositivo permisivo que permite: el libre movimiento de la mandíbula, "olvidar" las posiciones mandibulares inadecuadas, llevar la mandíbula a una posición articularmente adecuada, evitar el desgaste de los dientes y además, se puede utilizar como diagnóstico de disfunción cráneomandibular, es decir, para saber si una sintomatología compatible con una cierta patología es causada o no por la boca. El diseño de la misma, dependerá de la posición de los dientes remanentes del paciente que son los que indicarán las zonas retentivas que tenga, para utilizarlas en pro de un diseño lo menos invasivo posible y para la finalidad que tenga su prescripción.

Campo de aplicación de la invención

La invención se encuadra dentro del sector técnico de fabricación de prótesis y órtesis dentales, a medida.

Antecedentes de la invención

Actualmente las placas de descarga a medida gozan de gran popularidad y son prescritas por cirujanos/as maxilofaciales, estomatólogos/as y odontólogos/as (en adelante, dentistas) para mitigar los síntomas relacionados con el estrés dental, bruxismo, rechinamiento de dientes, protectoras de prótesis dentales sobre implantes, etc. Dichas patologías, lamentablemente, están en aumento debido al ritmo de vida tan acelerado que llevan la mayoría de ciudadanos/as.

Las placas dentales a medida que se realizan en la actualidad se confeccionan tan solo con metil-metacrilato (en adelante, acrílico).

Proporciones que indica el fabricante del mismo, se positivan dichas impresiones. Transcurrida una hora, se separa el yeso ya fraguado del material de impresión, consiguiendo de esta forma el molde de los dientes del paciente. Se montan los modelos de yeso de ambos maxilares en un articulador, con la ayuda del registro intermaxilar de cera que previamente nos habrá dado el/la dentista. A continuación, se coloca el modelo superior en un paralelómetro y se inclina la base del mismo hasta encontrar un buen eje de inserción de la futura placa de descarga. Con la ayuda de un marcador (lápiz, generalmente) se dibuja el ecuador de todos los dientes y se paraleliza con cera desde ese ecuador hasta el cuello de los dientes pues si entrara acrílico en esas zonas retentivas, la placa no tendría entrada en boca. Se pinta el modelo de yeso con un separador especial y se vierte polvo (polímero) de acrílico y con la ayuda de un cuentagotas, se va empapando con su mónomero. Se repite la operación hasta darle el grosor deseado. Se va configurando la forma de la placa, en todas sus caras: por oclusal hasta contactar con su antagonista, por vestibular hasta el ecuador de cada diente y por palatino se sobrepasa el cuello de los dientes invadiendo unos 2 centímetros el paladar. Cuando el grueso es correcto en todas sus caras, se coloca sumergido en agua, dentro de una máquina de polimerizado con la presión de aire, la temperatura y el tiempo que recomiende el fabricante del acrílico. Una vez polimerizado, con la ayuda de fresas y un micromotor, se rebaja el exceso de acrílico hasta darle la forma deseada, que en la cara vestibular de los dientes, coincidirá con el ecuador de los dientes o máximo, entrará ligeramente en zona retentiva pero muy poco, de lo contrario no entraría en boca. Una vez comprobado que en su cara oclusal contacta con todos los dientes antagonistas, se acaba de desbastar y con la ayuda de una pulidora, piedra pómez en polvo (tosca) y cepillos de pulido, se pule el acrílico y posteriormente se brilla con ceras especiales y borregas.

Esta técnica (la más extendida) presenta un gran inconveniente pues cuando polimeriza el acrílico, sufre una contracción inevitable. Cuando la placa dental a medida llega a la boca del paciente, esta contracción del material, se traduce en presión sobre los dientes naturales. Dicha presión debe ser eliminada por el/la dentista pues ocasiona molestias a los pacientes y podría llegar a mover sus dientes. Esos retoques, en no pocas ocasiones, hacen que la placa deje de adaptar y se descuelgue con la consiguiente incomodidad para el paciente. En la actualidad se subsana éste problema de falta de retención, colocando retenedores metálicos que ayudan a sujetar las placas pero que deterioran el esmalte de los dientes del paciente.

En cualquier libro de texto de odontología puede encontrarse información sobre placas de descarga. También en Internet es fácil encontrar información sobre ellas.

Otra forma de elaborar una placa de descarga, con la que se intenta mitigar el problema de la presión ocasionada por la contracción del material, es termoadaptando sobre el modelo unas planchas preformadas semirígidas para colocar posteriormente el acrílico sobre ellas pero con el inconveniente de que se despegan ambos materiales en un período muy corto de tiempo y que al ser semirígidas, en la cara oclusal (en la parte interna de la placa) se crea una zona blanda que crea un mal hábito en el paciente, el de apretar. Hay amplia literatura odontológica desaconsejando las placas que lleven algún material blando o semirígido en su cara oclusal.

Otro inconveniente de las actuales placas es que cuando un paciente deja de colocársela durante una o dos semanas, sus dientes naturales sufren una pequeña migración que impide que pueda volver a colocarla nuevamente. Para ello debe ir al dentista quien, nuevamente la deberá retocar para que entre en boca. Cada vez que el dentista debe retocar la placa, pierde más retención.

También se encuentran en el mercado placas de descarga confeccionadas simplemente con una plancha preformada termoadaptable semirígida o blanda (tipo protector deportivo), pero como se cita anteriormente, se desaconseja su uso.

En resumen, las placas dentales a medida que se confeccionan hoy en día presentan muchos problemas técnicos que las hacen incómodas tanto para el odontólogo (muchos retoques y varias visitas) como para el paciente (falta de retención, inseguridad al llevar en boca -y más para dormir- un objeto extraño que se mueve, gran invasión del espacio biológico y deterioro de sus dientes). Los "parches" que han venido a subsanar los problemas que se derivan de su fabricación, no han logrado los fines que buscaban.

Descripción detallada de la invención

La presente invención consiste en una nueva técnica de fabricación de placas de descarga a medida en las que, por primera vez, se invaden las zonas retentivas de los dientes que antes se evitaban, utilizando (en esas zonas) un material elástico y con memoria, que permite diseñar las placas lo más mínimamente invasivas posible y subsanar los problemas que las actuales presentan. Estas nuevas placas tienen como principal ventaja respecto a las actuales, que adaptan siempre al 100% sin presionar los dientes naturales, evitando retoques y por lo tanto desajustes. El nuevo diseño, se traduce en una mayor comodidad al paciente y en una mejora de su calidad de vida. También hay que destacar que el nuevo material elástico y con memoria que se empleará en las zonas retentivas, absorberá los pequeños movimientos migratorios de los dientes naturales del paciente, en caso de que éste no use la placa en una o dos semanas, período suficiente para que sus dientes sufran esos pequeñas movimientos.

La forma de elaborarla es la siguiente: Una vez colocados los modelos de yeso superior e inferior (corresponden a los maxilares...

1. La placa de descarga rebasada parcialmente con material elástico y memoria de forma, está caracterizada por ser una placa dental a medida, elaborada en su parte exterior con metil-metacrilato (duro y estático) de diferentes colores y en su interior (pero solo en las zonas retentivas previamente elegidas) con siloxano de vinilopolidimetilo (elástico y con memoria) para aprovechar las zonas retentivas de los dientes naturales sin dañarlos.

2. La placa de descarga rebasada parcialmente con material elástico y memoria de forma, está caracterizada, porque además de la reivindicación 1, lleva un detector de exceso de desgaste, integrado en su cara oclusal, llamado "driver life".

3. La placa de descarga rebasada parcialmente con material elástico y memoria de forma, está caracterizada, porque además de las reivindicaciones 1 y 2, lleva integrada una placa identificativa con el nombre y apellidos del paciente.

4. La placa de descarga rebasada parcialmente con material elástico y memoria de forma, está caracterizada, porque además de las reivindicaciones 1, 2 y 3, lleva integrada una placa con la fecha de su colocación en boca.