HORNACINA AUTOMONTABLE PARA CENIZAS MORTUORIAS.

1. Hornacina automontable para cenizas mortuorias, caracterizada esencialmente por estar constituida por una caja prismática cerrada,

contenedora en su interior de un receptáculo de cierre hermético en el que quedan depositadas dichas cenizas, tanto de personas como de animales queridos, un elemento o cuerpo de soporte y fijación de dicha caja y una base de sujeción y fijación del conjunto sobre el lugar de ubicación de la hornacina y presentando todos estos elementos medios adecuados de unión entre los mismos previéndose además una total autodependencia de tales elementos componentes para conformar un conjunto sólido, cerrado e inviolable, el cual podrá situarse sobre paneles de pie o sobre paredes libres de los módulos usuales de los cementerios.
2. Hornacina automontable para cenizas mortuorias, según la reivindicación anterior, caracterizada porque el elemento cerrado constituido por una caja prismática rectangular, presenta una amplia abertura frontal, preferentemente acristalada, en cuyo interior queda ubicado y adecuadamente sujeto el receptáculo contenedor de las cenizas, estando provista dicha caja prismática de unos pivotes cilíndricos que permiten la fácil e inmediata colocación y fijación de la caja sobre el elemento o cuerpo de sujeción, poseyendo estos pivotes un estrechamiento en su inicio que permite un pronto y correcto encaje sobre los correspondientes orificios del cuerpo de soporte, orificios que son de mayor anchura en su parte superior a modo de ojos de cerradura.
3. Hornacina automontable para cenizas mortuorias, según las anteriores reivindicaciones, caracterizada porque el cuerpo de soporte o fijación es de forma prismática rectangular, con una amplia abertura en su cara frontal, flanqueada por los orificios de sujeción de la caja con su receptáculo, de modo que uno de los pivotes cilíndricos de ésta, situado a través del correspondiente orificio, quede inmovilizado por el pestillo de una cerradura de llavín, accionable desde el frontal exterior, siendo entonces imposible separar la caja cerrada del cuerpo de soporte y fijación.
4. Hornacina automontable para cenizas mortuorias, según la reivindicación tercera, caracterizada porque el cuerpo de soporte o fijación posee en su cara posterior una amplia abertura, enmarcada por un reborde provisto de unos orificios con forma también de ojos de cerradura, situados simétricamente, permitiendo que dicho cuerpo de soporte se coloque y fije, a su vez de modo adecuado, sobre la base de fijación del conjunto.
5. Hornacina automontable para cenizas mortuorias, según las anteriores reivindicaciones, caracterizada porque la base de fijación del conjunto sobre el lugar de ubicación es de forma y dimensiones idénticas a las de la cara posterior del cuerpo de soporte, estando dotada de unos orificios para la colocación de pasadores adecuados de fijación sobre cualquier superficie y provista también de unos pivotes cilíndricos de forma idéntica a los que posee la caja cerrada, permitiendo así que el cuerpo soporte se le fije perfectamente al introducir los orificios sobre los pivotes de esta base, estando también prevista una placa complementaria de retención, que se fijará en su parte alta e impedirá que el cuerpo soporte pueda alzarse y desprenderse de la base, actuando a modo de seguro.
6. Hornacina automontable para cenizas mortuorias, según las anteriores reivindicaciones, caracterizada porque su ubicación se realizará, preferentemente, en conjunto y sobre un panel especial, de superficie plana con pies de soporte y visera superior protectora, en el que se fijarán las bases de cada hornacina, colocándose a continuación los restantes elementos, de manera que queden todas ellas yuxtapuestas, en conjuntos continuos, caracterizándose también por la posibilidad de disponerse sobre las superficies que queden libres de los módulos funerarios normales, de forma aislada o en conjunto.