Incubadora para bebés prematuros, que incorpora un sistema que permite la reproducción de sonido en el interior de la incubadora y un sistema de aislamiento lumínico,

controlados electrónicamente mediante un módulo (1) de control y procesamiento de datos, que comprende un sistema reproductor de sonido, puertos de comunicación USB para transferencia de datos, una pantalla táctil LCD, un receptor de sonómetro y un dispositivo de control del sistema de aislamiento lumínico

Incubadora para bebés prematuros.

Objeto de la invención

La presente solicitud de Patente de Invención tiene por objeto una incubadora para bebés prematuros, que aporta a la función a que se destina, varias ventajas que se consignarán más adelante, aparte de otras inherentes a su organización y constitución.

Antecedentes de la invención

En la actualidad y como referencia al estado de la técnica, debe mencionarse que se conocen diferentes modelos de incubadoras para bebes, a fin de mantener al bebé en un entorno cálido, húmedo e incluso suficientemente oxigenado.

Sin embargo, dichas características no son suficientes para establecer las condiciones adecuadas en el caso de que se trate de bebés prematuros.

Esto es así, ya que si bien es cierto que un bebé prematuro, tiene un bajo peso corporal, y su sistema de termorregulación suele ser ineficaz, por lo que esta función es esencial en cualquier incubadora. El entorno al que se somete el bebé prematuro, difiere totalmente del ambiente uterino, en el que se halla inmerso, y no es solo confort térmico lo que precisa, puesto que existen en torno al ingreso de un paciente de este tipo, una serie de estímulos tanto físicos como sensoriales, a los que el nuevo ser tiene que hacer frente, necesitando por tanto, de soportes añadidos a las prestaciones que una incubadora de bebés clásica suministra.

Los estímulos dolorosos son en muchas ocasiones inevitables, pero donde si se puede intervenir, es en el nivel de sonidos, alarmas, luces y todo aquello que conlleva el ambiente hostil hospitalario, así como las frecuentes manipulaciones, que sobreestimulan al bebé prematuro.

La música y cualquier otro estímulo externo percibido por los sentidos es esencial para el correcto desarrollo del recién nacido, sobre todo en periodos críticos del crecimiento y el desarrollo, donde la estimulación externa es básica.

Por tratarse de un fenómeno tan arraigado en el hombre desde sus orígenes, el hecho musical no conoce límites ni fronteras, colores o credos, épocas o lenguajes, y ha impregnado con sus ecos todas las zonas del accionar humano, obra tan poderosamente sobre lo más íntimo del hombre, y es tan completa y profundamente comprendida como una lengua universal, cuya claridad supera incluso a la misma intuición.

Durante los años 80 y 90 las revistas científicas de todo el mundo comenzaron a publicar estudios que demostraban que la música modifica realmente la estructura del cerebro en el desarrollo del feto; que los bebés reconocen y prefieren la música que oyeron por primera vez en el vientre de su madre; que una media hora de terapia musical mejora el funcionamiento del sistema inmunitario en los niños.

Los científicos han trabajado incansablemente para probar las hipótesis que subyacen a la idea de que el feto oye, reacciona ante el sonido, y aprenden de él. Por los resultados de sus trabajos, ahora se sabe que:

El oído es el primer órgano sensorial que se desarrolla dentro del útero.

El sistema auditivo empieza a funcionar de tres a cuatro meses antes del nacimiento.

Entre las semanas 28 y 30 de gestación, el feto comienza a reaccionar a los sonidos exteriores mediante cambios en el ritmo cardíaco y el comportamiento.

Determinados sonidos pueden afectar a la estructura y funcionamiento del sistema auditivo del feto.

La familiarización con sonidos concretos antes del nacimiento podría inducir una sensibilidad especial a, un reconocimiento de, e incluso una preferencia por esos sonidos después del nacimiento.

Por lo tanto, el feto humano es capaz de aprender en un grado que puede influir en su comportamiento después de nacer.

En opinión de muchos investigadores, este hecho de que los bebés aún no nacidos ya escuchan, aprenden y recuerdan la música y los sonidos, se puede aprovechar para estimular su desarrollo, e incluso tal vez para reducir al mínimo ciertos retrasos en el desarrollo, haciéndolos escuchar música antes de nacer, y es por ello que la presente invención conllevará al recién nacido, múltiples beneficios, ya que se le podría acercar además de la música, las voces previamente grabadas de sus progenitores, sonidos que por otra parte reconoce el bebé prematuro, dado que son los primeros que ha escuchado en su vida intrauterina, haciendo por otra parte a los padres partícipes del cuidado de su hijo, en un periodo tan difícil para ellos.

Lo que va bien para bebés nacidos al término de los nueve meses de gestación es aún más esencial para los bebés prematuros y los recién nacidos que están en las unidades neonatales, tanto dentro como fuera de cuidados intensivos.

Por lo tanto, el objetivo de la presente invención es la introducción de elementos que neutralicen de algún modo, los mencionados estímulos, a través de estímulos agradables intentando con ello hacer su estancia más tranquila y confortable, con tres objetivos fundamentales:

Neutralizar el ruido a través de sonido organizado ya sea por emisión de música, sonidos de la naturaleza, voz de los progenitores, etc.

Controlar el nivel de sonido existente dentro de la propia incubadora a través de un medidor de sonido, que evitaría sobreexponer al bebé a estímulos sonoros.

Y controlar la luminosidad a la que se somete al bebé dentro de la incubadora, mediante aislamiento lumínico.

Descripción de la invención

La incubadora para bebés prematuros, objeto de la presente invención, incorpora un módulo de control y de procesamiento de datos MCP, ubicado a una altura del suelo de aproximadamente 150 cm., con el objeto de hacer más cómoda su manipulación. Es importante también, que esté lo más separada posible de las paredes de la incubadora para una mejor visibilidad, una mayor comodidad de manipulación y para evitar perturbar a su inquilino, pues el MCP lleva incorporada una alarma luminosa y sonora.

El MCP se compone de:

Otra mejora se trata de un sistema de aislamiento lumínico que consiste en convertir la tapa o cubierta superior de la mencionada incubadora en cubierta convertible opaca, a través de un sistema de doble cubierta, mediante la inserción de una cortina o persiana opaca, que podrá cerrarse o no en función de las necesidades, el techo de la misma, para evitar las luces directas sobre el recién nacido y garantizarle un patrón de sueño eficaz.

La contaminación lumínica, es por supuesto un factor a tener en cuenta dentro de las unidades neonatales, en las que los bebés, quedan expuestos a la luz las 24 horas del día, con la consecuente alteración en su patrón de descanso. En la mayoría de los casos sin ningún tipo de cubierta y si la hay suelen ser unos muletos de algodón o a lo sumo un paño verde por encima, mientras que dotando a la incubadora de la mejora expuesta, se consiguen reducir los niveles de luminosidad al menos en las horas nocturnas, ya que hay que tener en cuenta que un tubo fluorescente, tiene entre 520 y 796 luxes y un...

1. Incubadora para bebés prematuros, caracterizada esencialmente porque incorpora un sistema que permite la reproducción de sonido en el interior de la incubadora y un sistema de aislamiento lumínico, controlados electrónicamente mediante un módulo (1) de control y procesamiento de datos, que comprende un sistema reproductor de sonido, puertos de comunicación USB para transferencia de datos, una pantalla táctil LCD, un receptor de sonómetro y un dispositivo de control del sistema de aislamiento lumínico.

2. Incubadora para bebés prematuros, según la reivindicación 1, caracterizada porque el sistema reproductor de sonido comprende un reproductor de sonido, uno o dos altavoces (2) y el correspondiente cableado (4).

3. Incubadora para bebés prematuros, según la reivindicación 1, caracterizada porque el sistema de aislamiento lumínico comprende un dispositivo electrónico que pliega y despliega una cortina o persiana opaca (5), a través del módulo de control y procesamiento de datos.

4. Incubadora para bebés prematuros, según la reivindicación 1, caracterizada porque el módulo de control y de procesamiento de datos es apto para controlar la intensidad o volumen del sonido, disponiendo de un sistema de seguridad que comprende un sonómetro (3) conectado al módulo de control y procesamiento de datos y se halla situado en el interior de la incubadora, evitando que todo tipo de sonido se reproduzca por encima de un nivel máximo adecuado de decibelios; el ciclo y duración del sonido; el tipo de sonido; y el sistema de aislamiento lumínico.