Cuchara de Semisólidos.

1. Cuchara de semisólidos caracterizada por un patrón de contorno variable que,

según las características del usuario, las necesidades de la producción industrial u otras ventajas de diseño, se adapta a diferentes posibilidades de forma y tamaño.

Este patrón puede estar marcado por una línea que indique al usuario la zona de pliegue para su manipulación.

El patrón debiera estar también constituido de un material plástico biodegradable, reciclable, inocuo y flexible que permita la transformación de la cuchara y de sus variadas posibilidades.

Cuchara de semisólidos.

Objeto de la invención

La invención presentada a registro como modelo de utilidad corresponde a una cuchara diseñada para la manipulación de semisólidos, granulados y pulverizados. Básicamente, la cuchara de semisólidos propuesta en esta solicitud, es una forma plana de material deformable (patrón) a la que una breve y sencilla manipulación convierte en un utensilio volumétrico capaz de realizar las funciones de una cuchara convencional.

Algunas de las principales características de la cuchara de semisólidos son: Facilidad de anexión a productos que la necesiten. Opción de un sólo uso. Opción reciclable por su composición material. Uso inocuo e higiénico. Nuevas ventajas de producción, distribución y almacenaje.

Antecedentes de la invención

Definición de cuchara.

La cuchara es un utensilio cotidiano ampliamente utilizado en sus numerosas versiones según su finalidad. Sus funciones principales son transportar y dosificar pequeños volúmenes de materia (liquida o sólida) y también remover disoluciones y mezclas.

Origen y posibilidades de la cuchara de semisólidos.

La idea de esta invención parte de la observación del mercado, en el cual existen una serie de productos que son susceptibles de un consumo inmediato, pero carecen de un utensilio que se lo facilite.

Por ejemplo, en el sector industrial alimentario existen numerosos productos semisólidos que pueden aprovechar las aplicaciones de la cuchara de semisólidos, ya que ésta puede facilitar su utilización y consumo.

Algunos alimentos, normalmente de calidad alta, ya disponen de cubiertos sencillos que permiten su fácil consumo en cualquier lugar (helados, ensaladas, sopas...) , pero hay otros productos de gama menor que consumirlos con inmediatez requerirían disponer de una cuchara. Si a este tipo de alimentos se les acompaña de la cuchara de semisólidos, es probable que su consumo puede incrementarse y el producto en si seria automáticamente más valorado.

La aplicación de las ventajas de la cuchara de semisólidos sobre productos existentes equivale a un mayor valor añadido por un mínimo coste, lo que debiera repercutir en mayores ventas.

La cuchara de semisólidos puede incrementar el consumo de productos alimentarios tradicionales, como los lácteos. Pero también puede crear una nueva oportunidad de negocio para nuevos productos y formatos como por ejemplo las compotas, ensaladillas con salsa, purés de legumbres, papillas, etc.

Entre otras posibilidades que tiene la cuchara de semisólidos está la dosificación y tratamiento de sustancias semisólidas, pulverizadas o granuladas que, bien por motivos higiénicos o por seguridad, conviene un utensilio de un solo uso. Sirvan de ejemplo para este caso la manipulación de las sales químicas de una fórmula magistral farmacéutica, el ofrecimiento de cata a un visitante de una feria gastronómica, o el tratamiento dórico de una piscina.

Descripción de la invención

La cuchara de semisólidos es una sencilla invención para facilitar el tratamiento de diversas substancias de uso común.

Desde un punto de vista industrial, la invención se basa en un patrón obtenido de un molde que recorta un material con las cualidades de flexibilidad, dureza y deformabilidad adecuadas.

La obtención industrial del molde para obtener el patrón de la cuchara de semisólidos no es el objeto de este modelo de utilidad, pero sí lo es el propio patrón en sus diferentes variaciones de forma y la misma técnica para transformar éste patrón en una cuchara funcional.

La técnica transformativa, es una característica esencial de esta invención, no un uso. En la secuencia de gráficos se observa el patrón estándar optimizado (fig. 1) , que ha de ser transformado de forma plana en 2D (dos dimensiones, fig. 2 y fig. 3) a cuerpo volumétrico en 3D (tres dimensiones, fig. 4, fig. 5, fig. 6, fig. 7 y fig. 8) para ser capaz de realizar las diversas funciones de una cuchara convencional.

Descripción de los gráficos

Fig. 1: La cuchara de semisólidos, patrón estándar optimizado, escala 1:1. Fig. 2: La cuchara de semisólidos, patrón estándar optimizado, perspectiva frontal. Fig. 3: La cuchara de semisólidos, patrón estándar optimizado, perspectiva lateral. Fig. 4: La cuchara de semisólidos, patrón en 2D donde se indican con flechas las zonas exteriores por donde realizar

la presión y la línea A-B que señala hasta la zona a doblar. Inicio de la secuencia transformativa a 3D. Fig. 5: Indicación de la presión sobre el borde exterior en el punto A, dejando éste en la zona interna del pliegue. Fig. 6: Indicación de la presión progresiva sobre el borde exterior del punto A al punto B, dejando la línea A-B en la

zona interna del pliegue.

Fig. 7: Indicación de la presión última sobre el borde exterior en el punto B, dejando éste en la zona interna del pliegue. Fin de secuencia transformativa a 3D. Fig. 8: Perspectiva de la cuchara de semisólidos en 3D preparada para su utilización. Fig. 9: La cuchara de semisólidos, patrón estándar optimizado, escala 1:1, versión reducida optimizada. Fig. 10: La cuchara de semisólidos, patrón estándar optimizado, escala 1:1, versión alargada optimizada. Fig. 11: La cuchara de semisólidos, patrón estándar optimizado, escala 1:1, versión grande espatulada. Fig. 12: La cuchara de semisólidos, patrón estándar optimizado, escala 1:1, versión mango alargado. Fig. 13: La cuchara de semisólidos, patrón estándar optimizado, escala 1:1, versión utilización de doble mango. Fig. 14: La cuchara de semisólidos, patrón estándar optimizado, escala 1:1, versión cuchara-tenedor. Fig. 15: Ejemplo de patrón de producción de la cuchara de semisólidos en su forma estándar optimizada. Fig. 16: Ejemplo de patrón de producción de la cuchara de semisólidos en su versión espatulada optimizada. Fig. 17: Ejemplo de patrón de producción de la cuchara de semisólidos adherido a un producto.

1. Cuchara de semisólidos caracterizada por un patrón de contorno variable que, según las características del usuario, las necesidades de la producción industrial u otras ventajas de diseño, se adapta a diferentes posibilidades de forma y tamaño. Este patrón puede estar marcado por una línea que indique al usuario la zona de pliegue para su manipulación.

El patrón debiera estar también constituido de un material plástico biodegradable, reciclable, inocuo y flexible que permita la transformación de la cuchara y de sus variadas posibilidades.