VENTOSA AUTOMATICA.

Ventosa automática, esencialmente caracterizada por constituirse a partir de un cuerpo cilíndrico,

hueco, desprovisto de ambas bases, de las cuales la inferior recibe el acoplamiento de un corto tramo cónico que seguidamente se continua en otro cilíndrico de menor diámetro, habiéndose previsto en este tramo cilíndrico inferior la adaptación externa de una brida convencional para, a su través, vincular el conjunto al punto óptimo de la tubería de que se trate, con la particularidad este cuerpo cilíndrico de presentar una serie de aletas vinculadas radial y longitudinalmente a su superficie lateral interna, así como otras tantas aletas, en igual disposición, en correspondencia con la tambien superficie interna del tramo cónico, viniendo estas últimas aletas citadas a constituir los puntos de apoyo y solidarización de un deflector cónico cuya cúspide se orienta centradamente hacia la boca inferior del conjunto, y su diámetro determina un paso anular respecto a la pared interna del cuerpo cilíndrico, caracterizándose además dicho cuerpo cilíndrico por disponer en su embocadura superior de una brida íntimamente vinculada a su pared interna y enrasando con el borde de tal embocadura, cual brida presenta un acusado achaflamiento en el canto de su diámetro interno relacionado con la superficie orientada hacia el interior del cuerpo cilíndrico, así como la aplicación de una junta anular de estanqueidad solidarizada a la superficie de la brida opuesta a la que incorpora el citado achaflamiento para orientarse tal junta a la superficie lateral de una nueva brida independiente que se destina, mediante esparragos roscados, a vincularse a la brida solidaria del cuerpo cilíndrico, presentando esta brida independiente el encastramiento de una junta de, por ejemplo, neopreno, con orientación hacia el interior del cuerpo cilíndrico, así como una campana perforada que, fijada a la misma mediante los aludidos esparragos, queda estabilizada sobre el ojo de tal brida; habiéndose previsto, asimismo, en el interior del susodicho cuerpo cilíndrico el alojamiento de un segundo cuerpo, tambien cilíndrico y hueco, que se instala con relativa holgura en el espacio definido por las aludidas aletas propias del cuerpo cilíndrico externo, cual segundo cuerpo, en el estado de reposo de la ventosa, descansa sobre el apoyo que supone la presencia del deflector cónico, quedando su base superior a cierta distancia de la bridas superiores.